Tras la beatificación de los mártires de la Diócesis de Chimbote (Miguel, Zbigniew y Sandro), el 5 de diciembre del 2015, se tuvo la intención de promocionar su mensaje y testimonio de vida, como sacerdotes y misioneros en las comunidades parroquiales en Pariacoto y Santa, junto a los más sencillos.

Así, a mediados de julio y gracias a las gestiones del padre franciscano Gregorio Adamczyk y, se inauguró el Museo de los Beatos Mártires en Chimbote; un lugar para recordar a los frailes Miguel Tomaszek y Sbigniew Strzalkoswki y al padre Sandro Dordi, sacerdotes que fueron asesinados por Sendero Luminoso en el año 1991.

Fray Luis Huaricallo Apaza nos abrió las puertas de este recinto, ubicado dentro de la casa de retiro Paz y Bien, ubicado en el sector de Santo Domingo, a pocos minutos de Chimbote. En el museo encontramos vestuarios, escritos, libros, publicaciones, fotografías, recuadros, reliquias y piezas personales que usaron los misioneros, desde su llegada a estas tierras hasta el día en que fueron asesinados.

Todos los objetos y accesorios se encuentran debidamente conservados en vitrinas y espacios para el disfrute y veneración de los que apreciaron la vida consagrada al evangelio, sirviendo a los demás y por su amor infinito a Dios.

“Fue un proyecto que se trabajó desde el año pasado y ha sido posible cumplir gracias a la colaboración de varias personas. Este es un lugar cálido y sencillo que está abierto para toda la población que desee visitar”, expresó.

Refirió que con ello se busca recordarlos por su entrega al evangelio y su testimonio de vida al no abandonar los distritos Pariacoto y Santa, pueblos que pasaban por momentos difíciles ante las amenazas de Sendero Luminoso. “A pesar de todo mantuvieron firme su misión de anunciar el evangelio y estar con los más necesitados. Ellos tenían fe de que quedándose podían construir una ciudad digna que necesitaba mucho de los sacerdotes”, sostuvo.

El fraile señaló que continuarán trabajando para fomentar la visita de los chimbotanos al museo y de todos quienes deseen conocer un poco más del papel de los mártires de la Diócesis de Chimbote; quienes sirvieron a los más pobres, defendiendo sus derechos, y acompañando en la fe a niños y jóvenes. Ellos se convirtieron en los primeros beatos mártires del Perú.

Como se recuerda, el 9 de agosto de 1991 fueron asesinados los sacerdotes Michael Tomaszek y Zbigniew Strzalkowski, en Pariacoto. Semanas después, el 25 de agosto, el padre Sandro Dordi también fue víctima de los terroristas en el distrito de Santa, camino a Vinzos.

(Mar Adentro agosto 2018)

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