¡Éste es!
- Categoría: Padre Jaume Benaloy Marco
- Publicado: Lunes, 17 Enero 2011 16:18
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¡Éste es!
Jn 1,20-34
Comenzó el tiempo ordinario en el calendario litúrgico y lo hacemos con el anuncio de una Buena Noticia. Juan Bautista es el mensajero, el precursor, enviado a preparar el camino. Asume la misión de señalar que ya está aquí, que se ha cumplido el tiempo, que Dios es fiel a sus promesas y no defrauda a la humanidad.
¡Éste es! Sí, Jesús es el Mesías, el Hijo de Dios, el Salvador, el Cordero que quita el pecado del mundo. Al ver acercarse a Jesús no duda y se convierte en su testigo fiel. Sabe que el nacido en Belén de María Virgen es el Cristo, que ha de bautizar con Espíritu santo. Por eso no puede callar, silenciar el Evangelio y guardarse para sí tan Buena Noticia. “Yo lo he visto, y he dado testimonio de que él es el Hijo de Dios”, grita con entusiasmo. Ojalá también nosotros sepamos ver a Jesús cada día, creamos plenamente en Él y seamos sus testigos valientes.
¡Éste es! Jesús es el Evangelio y, por ende, el kerygma permanente de la Iglesia. No hay ni habrá otro anuncio mejor. Dios ya está entre nosotros. Es Enmanuel. Como el Bautista, ahora nos toca crecer como discípulos para servir al mundo como misioneros.
¡Es la hora de la misión! Al estrenar el 2011, la diócesis de Chimbote ha celebrado la XXVIII Asamblea de pastoral. Ha sido un tiempo de gracia y comunión eclesial para revisar el camino diocesano, renovar ilusiones y convertir nuestra vida personal, comunitaria y pastoral. Los desafíos contemporáneos son fenomenales. En nuestras comunidades descubrimos debilidades y amenazas no pequeñas. También vislumbramos retos urgentes y oportunidades fascinantes: la iniciación cristiana, poniendo en el centro la Palabra de Dios y la eucaristía, la comunión eclesial, el cuidado de la vida y la familia, la salvaguarda de la creación y la evangelización a través de los medios de comunicación social. No será fácil, pero no estamos solos. Contamos con la fuerza de Dios, que todo lo puede, y las manos de cada uno de los bautizados. Nos acompaña María Santísima y el aliento poderoso del Espíritu Santo. ¡Éste es el momento de la Iglesia misionera!
P.Jaume Benaloy Marco
Jefe DACIR Uladech Católica